Una de las series a las que más he estado enganchado este año ha sido a Arrow, una serie de superhéroes donde el protagonista es Green Arrow y no es ningún spin off de Smallville por suerte y digo por suerte porque este Green Arrow mola más que el de Smallville, eso es así.
Arrow se parece más a la trilogía de El Caballero Oscuro de Christopher Nolan que ha Smallville y es que incluso el argumento de querer arrasar la ciudad es similar al de Batman Begins y como he dicho la serie es muy muy buena y te engancha por completo. Estos 23 episodios han sido muy intentos y esos flashbacks de la isla en donde pasó 5 años Oliver son muy buenos porque esa historia está muy bien y la seguirán mostrando en la segunda temporada.
Primero Oliver Queen como Arrow mataba y después preguntaba pero tras la entrada de sus compañeros Diggle y Felicity el personaje es consciente de que debe ser más un héroe que un vigilante y eso se nota en los últimos capítulos. La rivalidad entre su mejor amigo Tommy y Oliver por Laurel crece episodio a episodio y llega a su vértice cuando Tommy los ve enrollándose y el final de temporada es brutal, desde que acabaron Smallville, 24 o Lost no había vuelto a ver un final de temporada tan espectacular y el de Arrow lo es.
Malcolm Merlyn (padre de Tommy) ha puesto bombas por la ciudad para hacer estallar los Glades y Oliver y su equipo deben detenerlo, Tommy se entera de lo de su padre y se enfrenta a él y Oliver acaba matando a Malcolm y Quentin Lance consigue detener la bomba de los Glades, pero hay otra bomba que se activa si Malcolm muere y se activa y explotan bombas por toda la ciudad y Laurel queda atrapada en donde trabaja y Tommy la salva, pero a él le caen escombros y muere y obtiene la redención.
Oliver pierde a su mejor amigo, mata a su padre, ve como su madre va a la cárcel y no puede salvar a su ciudad, así acabó la temporada de Arrow y ya tengo muchísimas ganas de ver la segunda temporada que se estrenará en Otoño.
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